Las casas encantadas de León
¿Sabrías decir cuáles son las casas encantadas de león?
El Palacio del Conde Luna
El Palacio del Conde Luna es, a lo largo de siete siglos, fue residencia de Pedro Suárez de Quiñones y Juana González de Bazán, los dueños que hicieron la construcción de la casa en 1388, pero, este Palacio ha sido, además, un café para la ciudad, almacén de frutas, banco y funeraria.
Monumento Nacional desde 1931 y Bien de Interés Cultural, ha sufrido numerosos accidentes, como la explosión de una bombona en 1976 y el desplome del torreón renacentista en 1979, lo que acrecentó la ‘leyenda negra’ del edificio. En la actualidad es la sede del Centro de Interpretación de la Historia del Reino de León.
Las excavaciones en el inmueble han permitido descubrir que del edificio fundacional se conservaba una parte más amplia de lo que se creía. La investigación realizada desveló que la primera sede de los reyes de León, durante los siglos X y XI, se encontraba en el solar que hoy ocupa el palacio.
Este palacio del siglo XV es el escenario de todo tipo de fenómenos respaldados por una historia funesta. En este mismo siglo, el obispo Vergara se escondió en el palacio tras asesinar al tesorero de la capital, pero le encontraron y lo asesinaron también.
Cinco siglos después, los visitantes del palacio sienten presencias, ya que, se piensa que el obispo deambula por los pasillos el Palacio para atormentar a las almas que visitan el lugar.
La casa Sierra-Pambley
La Casa Sierra-Pambley está situada en la plaza de la Catedral, fue construida en 1848 por Segundo Sierra-Pambley, y en ella se conserva todo el ajuar con que se amuebló y equipó la estancia desde papeles pintados y moquetas, que por entonces eran una novedad, hasta los muebles, tejidos, vajilla y cubiertos.
La casa de la plaza de la catedral fue construida en los años cuarenta del siglo XIX por Segundo Sierra-Pambley. El retrato de la vida doméstica de una familia ilustrada del siglo XIX y el transcurrir de la función pedagógica de la Fundación Sierra-Pambley forman parte de su doble objetivo.
El arte mobiliario tiene más alta importancia de lo que a primera vista parece. Todo contribuye a hacerlas más útiles, cómodas y agradables. “El descuido con que este género de cosas se mira en pueblos poco adelantados es causa, y muy principal, de que en esos pueblos sea tan desnuda y pobre la vida de familia” según (F. Giner de los Ríos: Estudio sobre las artes industriales y cartas literarias)
La decoración, perteneciente al primer historicismo, revela la introducción temprana de las modas europeas, de origen francés y, en menor medida, inglés. Se trata de un conjunto armónico y completo, deliberadamente moderno para la época, en el que destacan, además, las novedades aportadas por la industrialización a las casas de la burguesía: los muebles de comodidad, las mejoras en la iluminación y calefacción, los nuevos materiales como la gutapercha, etc.
El visitante puede recorrer la casa, cuyas estancias le revelan a qué usos se destinaban, quiénes debían ocuparlas y cómo hubieran pasado los días entre sus paredes. Pero, también se puede sentar como una presencia espiritual se encuentra en las estancias de la casa para asustar o no tanto a los visitantes. Se cree que propio Segundo Sierra-Pambley deambula de noche por la casa con pena en su mirada.
La Catedral con Simón el Mago
La catedral de León es un lugar magnifico y único por su gran luminosidad gracias a las vidrieras y a su complejidad como «edificio religioso». Uno de los misterios que se descubren de la Catedral es una historia desconocida por los habitantes de la ciudad.
Según cuenta la leyenda el líder samaritano Simón el Mago del año 41 d.c fue conocido por realizar trucos y hechizos con el fin de proclamarse el verdadero mesías. El origen de su historia se cree que fue a raíz de viajar a Alejandría. Vivió una vida llena de secretos y profecías, pero, poco ha llegado hasta nosotros del fallecimiento el samaritano.
Los únicos relatos que quedan en la actualidad es que probablemente fue lapidado ante Nerón, pero, otros cuentan que murió después de ser enterrado vivo para resucitar al tercer día.
Lo más curiosos de la historia, es que, a miles de kilómetros de su ciudad y en una gran catedral en la ciudad de León aparece retratado en una vidriera la figura de Simón el Mago, un hecho que ha pasado siglos desapercibido por los leoneses y los visitantes. Cuando entras en la catedral, solo tienes que dar la vuelta a la girola hasta llegar a la capilla de San Antonio. Allí encontrarás a Simón, concretamente en la vidriera central, donde podrás ver dos escenas protagonizadas por él.
Cuenta la leyenda de la Catedral que por las noches el samaritano vaga por las instancias de la catedral intentando realizar hechizos, cuando más o menos curioso, ya que, solo sucede de noche y cuando la catedral está vacía. Algunos religiosos que se han encontrado dentro de la catedral cuando ha anochecido notan una sombra por la instancia donde se encuentra la vidriera del samaritano Simón el Mago.
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